El P. Gary Graf, sacerdote de la Arquidiócesis de Chicago, ha emprendido una larga travesía a pie por los inmigrantes en Estados Unidos, desde Dolton, el pueblo de la infancia del Papa León XIV, hasta la Estatua de la Libertad en Nueva York, un símbolo histórico de la llegada de los inmigrantes al país norteamericano, bajo el lema “Levántate y exprésate”.
“Lo que está pasando en este país, yo siento, hiere el corazón de Dios”, denuncia el sacerdote que estuvo varios años en México, que ha visitado nueve veces Bolivia, que ha estado en Colombia, Centroamérica y que conoció a San Óscar Romero en 1978, cuando fue a una misión en Panamá.
El sacerdote de 67 años y ordenado en 1984 pertenece al grupo de “Sacerdotes por la Justicia para los Inmigrantes”, e inició su larga caminata de 50 días el 6 de octubre y ya ha recorrido un poco más de la mitad del trayecto. En entrevista con EWTN Noticias, desde Clarion, Pensilvania, comparte que “el inmigrante me ha bendecido durante 41 años de sacerdote. Me ha enseñado su fe, su religión, su cultura, costumbres”.
“De Dolton, Illinois, hasta la Señora de la Libertad en Nueva York uno tiene que inventar su ruta” como lo hacen “millones de inmigrantes, para quienes tampoco hay un camino hacia la ciudadanía. Uno necesita buscar la ayuda de Dios, de la Iglesia, de otros ángeles en el camino para poder lograr esa meta”, afirma el presbítero en perfecto español.
El cálculo del sacerdote, que ha pasado por distintos caminos rurales, es que recorrerá finalmente unas 800 millas, alrededor de 1.300 kilómetros, con un total de 1,65 millones de pasos.