León XIV saludó hoy, en su propio idioma, a más de 10.000 croatas que llegaron a la Plaza de San Pedro con motivo del Jubileo de la Esperanza. Ante los peregrinos, el Papa aseguró que “la fe crece y se fortalece cuando se comparte”.
“¡Alabado sea Jesús y María, Hvaljen Isus i Marija!”, exclamó al inicio de su saludo a la multitud.
El Santo Padre reconoció que la “numerosa y orante” presencia de los peregrinos croatas “es un signo elocuente de la vitalidad de la fe de su pueblo, que a lo largo de los siglos se ha mantenido firme en la comunión con la Iglesia y fiel al Sucesor del Apóstol Pedro”.
Además, destacó que la fe del pueblo croata no ha permanecido estancada en el pasado sino que sigue dando fruto hoy “gracias al testimonio de sus familias, sus comunidades parroquiales y sus asociaciones”.
“La tradición heredada de sus antepasados es un tesoro precioso, que custodian con esmero y que están llamados a renovar continuamente, siempre abiertos a reconocer lo que el Espíritu Santo inspira”, dijo el Papa León.
También agradeció la fidelidad del pueblo croata “vivida en lo concreto de su vida diaria” y en diferentes partes del mundo. Les animó a permanecer “unidos a sus raíces cristianas” y a ofrecer “el testimonio de un pueblo que ama a Cristo y a su Iglesia”.