El cardenal alemán Gerhard Ludwig Müller calificó a Charlie Kirk como “mártir de Jesucristo” y condenó la “celebración satánica” de su asesinato por parte de algunos detractores, en una entrevista publicada una semana después del crimen del activista cristiano conservador.
“Desde una perspectiva sobrenatural, [Kirk] no murió como víctima de un asesinato político, sino como mártir de Jesucristo, no en el sentido de quienes son canonizados, sino como alguien que dio testimonio (del griego martyros) a través de su vida”, señaló Müller en diálogo con la periodista católica Diane Montagna, publicado en Substack el 17 de septiembre.
“[Kirk] entregó su vida siguiendo a su Señor, como un sacrificio por la verdad de que el hombre ha sido creado a imagen de Dios, varón y mujer, y en oposición a las mentiras y la automutilación promovidas por la llamada ‘ideología trans’ y los ‘cuidados de afirmación de género’”, añadió el purpurado.
El cardenal subrayó que Kirk “defendió y vivió en defensa de la belleza y la santidad del matrimonio y de la familia, según el designio de Dios Creador, y defendió la dignidad de toda vida humana desde la concepción hasta la muerte natural”.
Kirk, cristiano evangélico, fue asesinado a tiros el 10 de septiembre mientras conversaba con estudiantes en un evento en la Universidad del Valle de Utah. En el momento del ataque respondía a una pregunta sobre el transgenerismo y la violencia con armas. El presunto asesino, Tyler Robinson, mantiene una relación sentimental con un hombre que se identifica como transgénero, quien, según las autoridades, coopera con la investigación.
Meses antes de su muerte, Kirk había expresado su deseo de “ser recordado por el coraje de mi fe”. Fue un firme defensor del derecho a la vida de los no nacidos y un opositor activo de la ideología de género. En sus intervenciones ante universitarios solía proclamar la divinidad de Cristo e invitaba a priorizar a Dios y la familia sobre cualquier otra cosa.