El presidente Donald Trump instó a los fiscales de Washington DC a solicitar la pena de muerte para cualquier persona condenada por asesinato en la capital de Estados Unidos, un plan que ha recibido críticas del grupo de defensa Catholic Mobilizing Network.
"Cualquiera que asesine (a alguien) en la capital: pena capital", declaró Trump a la prensa la semana pasada.
"Si alguien mata a alguien en la capital, Washington DC, solicitaremos la pena de muerte, y esta es una medida preventiva muy sólida y todos los que la han escuchado están de acuerdo", añadió Trump. "No sé si estemos preparados para ello en este país, pero... no tenemos otra opción", afirmó.
El presidente no aclaró cómo impondría tal requisito.
El mes pasado, Trump inició una intervención federal en la policía de Washington DC y desplegó a la Guardia Nacional para apoyarla. La Ley de Autonomía del Distrito de Columbia permite a un presidente tomar el control de la policía de la ciudad durante 30 días sin la aprobación del Congreso en situaciones de emergencia.
El presidente citó la tasa de criminalidad de la ciudad como la emergencia que justifica la intervención federal temporal.