Después de cuatro décadas de matrimonio y de formar una familia con tres hijos y varios nietos, Patrick Bruen descubrió que Dios lo llamaba a una nueva vocación: el sacerdocio, al que llegó a los 67 años.
El pasado 7 de junio fue ordenado sacerdote en la Arquidiócesis de Detroit (Estados Unidos), junto a Benjamin Schroeder, de 26 años, en la Catedral del Santísimo Sacramento, en Detroit.
“Conocí a mi esposa y nos casamos. Formamos una familia, y cuando nuestros hijos crecieron, ella empezó a enfermarse cada vez más. Cuando todos se casaron y se mudaron, a los 61 años, mi esposa falleció”, recordó en una entrevista publicada por su arquidiócesis.
Fue entonces, en medio del dolor, cuando comenzó a percibir la presencia del Señor de un modo especial. “Comencé a experimentar una especie de manifestación del Sagrado Corazón de Jesús. De pronto, veía imágenes y estatuas del Sagrado Corazón en todas partes; era como si esa presencia no se apartara de mi mente”, relató.
“De pronto, esas imágenes parecían mirarme a mí”, dijo, convencido de que se trataba de un signo para discernir una nueva llamada.