Obispo anima a los católicos a seguir lanzando la red en este mundo sediento de Dios

Durante la Misa de clausura, celebrada en la capilla de la Casa de Encuentros, Mons. Balbín reflexionó sobre el milagro de la pesca milagrosa e indicó que “el Señor nos sigue pidiendo que lancemos la red”.

“Que sigamos lanzando la red, que no nos debemos desanimar, que a pesar del mundo y de la cultura que nos toca vivir, hay gente, hay personas que están ávidas, sedientas de la Palabra y sedientas de Dios”, señaló.

El Obispo de Cartago aseguró que Cristo “quiere contar con nosotros para ese trabajo, para esa misión, para ese apostolado de llevar este mensaje a través de nuestro testimonio” y de la Palabra, para lo cual “nos tenemos que preparar constantemente”.

En su homilía, Mons. Balbín señaló que también es importante preparar a las personas que “han de continuar en el trabajo maravilloso” de los movimientos y nuevas comunidades para que estas perduren.

Indicó que de lo contrario se corre el riesgo de desaparecer porque quien lidera “no supo el momento preciso y exacto de hacerse a un lado para decir: ustedes sigan y yo continúo aquí”, a la sombra, orando y velando con la experiencia y la sabiduría que dan los años.

El obispo concluyó su homilía animando a los movimientos eclesiales y nuevas comunidades a “continuar en el trabajo” de construir el Reino de Dios”.

“Que el Señor nos ayude a todos a ser el mejor testimonio que podemos ser delante de los demás, con palabras, pero especialmente con nuestras obras”, expresó. 

Durante el congreso se hizo un diagnóstico de la situación actual de los movimientos y nuevas comunidades en Colombia y se reflexionó sobre el papel del laico en una Iglesia sinodal.

Asimismo, se abordó la promoción y defensa de la vida y la familia. El 30 de julio, los participantes asistieron a la adoración eucarística y al día siguiente tuvieron una reflexión sobre la centralidad de Jesús Eucaristía en la vida de la persona.