Homilía 20 de agosto de 2017

Hoy el Señor se topa con esta mujer cananea, que le pide con insistencia. Y tenía razón para hacerlo, su hija estaba enferma, estaba endemoniada. No se iba a detener ante nada y no suelta a Jesús hasta que le concede lo que le pide. Creo que es un buen modelo para nosotros, no lo suelta a Jesús hasta que se lo concede. ¿Tú también eres así cuando rezas? ¿Insistes hasta que Dios te conceda? ¿O eres de los que se rinde rápido, de los que reza poco?