21 de septiembre de 2017 / 09:29 PM
Chile se ha transformado en uno de los principales destinos de las migraciones latinoamericanas por razones humanitarias. Como respuesta a este fenómeno, algunas parroquias han desarrollado proyectos de acogida y enseñanza del español, las primeras barreras que enfrentan los extranjeros haitianos en su llegada al país.
Condiciones de hacinamiento, el creole (un idioma distinto al español), una lenta normativa migratoria y como consecuencia una difícil búsqueda laboral, son algunos de los obstáculos de quienes dejan Haití para buscar seguridad, desarrollo y dignidad.
Con ese diagnóstico, el P. Juan Carlos Cortés, Párroco de San Saturnino en el popular barrio Yungay, Santiago, comenzó el 7 de mayo de 2016 en el marco del Año de la Misericordia, a dar desayunos y clases de español a tres haitianos. Al término del mes y con el apoyo de la pastoral de acogida de la parroquia, el número aumentó a 50.