Con el cierre de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, en el Vaticano, el Papa Francisco clausuró el 20 de noviembre el Año Santo de la Misericordia, convocado por él en diciembre de 2015.
Antes de iniciar la Misa por la Solemnidad de Cristo Rey del Universo, en la Plaza de San Pedro, el Santo Padre se dirigió a la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro y presidió la ceremonia de clausura del Año Jubilar.