Este sábado Francisco tuvo un encuentro con jóvenes de Sarajevo y de otras partes de los Balcanes, una región de Europa que en la década de 1990 sufrió una cruenta guerra con 97.000 muertos, entre ortodoxos, católicos y musulmanes; de estos últimos, 8.000 fueron masacrados en Srebrenica. Hoy un coro de niños de esta ciudad cantó al Papa para mostrar que es posible superar los odios y alcanzar la paz.
El coro se llama "Superar" y está formado por niños y adolescentes serbios (cristianos ortodoxos) y musulmanes, que entonaron al Papa la canción "Love People". Aunque la masacre de Srebrenica marcó profundamente las divisiones étnico-religiosas de la región; el canto de paz y amor de estos menores ha dado un mensaje de esperanza.
En declaraciones a Radio Vaticana, el maestro de coro, Ismar Poric, describió la escuela de música y coro como un proyecto multi-étnico de reconciliación y un modelo inspirador para Bosnia Herzegovina y para la comunidad internacional.