Los participantes del Primer Congreso de Televisión Católica Latinoamericano y del Caribe, realizado en Medellín, suscribieron un documento que los compromete a llevar el mensaje evangélico a los hogares con programas de calidad.
"En el actual contexto socioeconómico y político latinoamericano, donde la lógica del mercado pretende imponerse como principio de acción cotidiana, y los canales comerciales hacen de la persona una mercancía, estamos convencidos que debemos hacer de la televisión un instrumento de personalización", afirma el documento final.
El texto añade que el objetivo de las televisoras debe ser, por un lado, que la persona se encuentre con Jesús, y por otro, que se evidencie "el drama de hombres y mujeres concretos que luchan cotidianamente para que sus derechos mínimos sean respetados, dándoles esperanza y fe".
