Un equipo de más de 70 médicos chilenos se unió para salvar la vida de una bebé dentro del vientre de su madre, con una compleja y novedosa cirugía.
Previamente a la operación, los expertos, recuerda su madre, Daniela, le dijeron que la bebé tenía "cero posibilidades" de vida una vez nacida. La niña, aún en el vientre de su madre, presentaba atresia laríngea, una malformación congénita debajo de la laringe que obstruye el paso de aire hacia los pulmones.
Los bebés nacidos con esta malformación, al no poder respirar, fallecen tras el parto una vez cortado el cordón umbilical, que los proveía del oxígeno necesario.