Este mediodía el Papa Benedicto XVI rezó el Ángelus desde la ventana de su Palacio Apostólico con ocasión de la Solemnidad de Todos los Santos, y destacó que la santidad es una tarea no solo de todos los cristianos si no también de todos los hombres.
Al recordar que en los inicios del Cristianismo “los miembros de la Iglesia eran llamados ‘los santos’”, el Santo Padre afirmó que “en efecto, el cristiano ya es santo, porque el Bautismo lo une a Jesús y a su misterio pascual, pero que al mismo tiempo debe llegar a serlo conformándose con Él más íntimamente”.
“A veces se piensa –dijo el Papa- que la santidad es una condición de privilegio reservada a unos pocos elegidos. En realidad, ¡ser santo es la tarea de todo cristiano, de todo hombre!”