El grupo de parlamentarios provida del Reino Unido All-Party Parliamentary Pro-Life Group (APPG) denunció recientemente que aquellos médicos que se niegan a practicar abortos, aplicando la objeción de conciencia, enfrentan distintos tipos de discriminación en sus centros de trabajo y a muchos se les niegan los ascensos.
En el Reino Unido el aborto es legal hasta las 24 semanas de embarazo en los territorios de Inglaterra, Escocia y Gales. En casos en los que se considere que la salud de la madre está en peligro o el bebé nacerá con graves discapacidades físicas o mentales, esta práctica se puede realizar legalmente pasado ese plazo.
En su sección 4, la Ley del Aborto de 1967 reconoce que "ninguna persona tendrá ninguna obligación, ya sea por contrato o por cualquier requisito legal o de otro tipo, para participar en cualquier tratamiento autorizado por esta Ley a la que tiene una objeción de conciencia".