Al término de la Audiencia General, el Papa Benedicto XVI saludó a los peregrinos que llegaron a la Plaza de San Pedro y los alentó a dejar que la Cruz de Cristo y el ejemplo de la Virgen María ilumine sus vidas.
"Hoy la liturgia nos hace meditar en el misterio de la Cruz del Señor y mañana en los dolores de su Madre. La Cruz de Cristo y el ejemplo de María, Virgen Dolorosa, iluminen vuestra existencia", expresó el Pontífice en italiano.
También se refirió a la beatificación hoy en Cosenza (Italia), de Sor Elena Aiello, fundadora de las Religiosas Mínimas de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo.