Los medios locales han informado de que el matrimonio cristiano estaba acusado de quemar una copia del Corán y arrojarlo a la basura en la provincia de Punjab el pasado martes. La policía ha dicho que sus cuerpos fueron quemados en la fábrica de ladrillos en la que trabajaban.
"Hemos arrestado a 44 personas, se trata de problema local incitado por el mulá de la mezquita de la localidad", ha contado a Reuters el jefe de la Policía regional, Jawad Qamar. "Ningún grupo terrorista o religioso particular está detrás de este ataque", ha añadido.
Las acusaciones por blasfemia, incluso cuando se llevan ante la justicia, pueden conllevar pena de muerte en Pakistán, de mayoría musulmana. Es complicado luchar contra ello ya que las leyes no definen claramente qué es la blasfemia. La presentación de la evidencia puede estar, en ocasiones, considerada como una infracción.