"Una Iglesia en salida, samaritana, para encontrar a Dios que habita en la ciudad y en los pobres", pidió este jueves el Papa Francisco al presentar cuatro desafíos para la evangelización de las ciudades, la cual, advirtió, tiene que estar alejada de cualquier "pastoral relativista", y cercana a los pobres e inmigrantes.
Estos cuatro desafíos fueron presentados en la Sala del Consistorio del Palacio Apostólico, durante el encuentro con los participantes de la segunda fase del Congreso Internacional de la Pastoral de las Grandes Ciudades, que se celebró en Barcelona (España) del 24 al 26 de noviembre.
En un discurso abordado desde la experiencia que tuvo como Arzobispo de Buenos Aires, Francisco profundizó sobre cuatro desafíos y posibles horizontes de la pastoral urbana, ''los lugares desde donde Dios nos está llamando... y los aspectos a los cuales creo que debemos prestar especial atención ''.