Antes de dirigir el rezo del ángelus este domingo 18 de julio desde la ventana del palacio apostólico del Vaticano, el Papa Francisco recordó el valor del descanso y de la compasión. Alertó sobre el peligro del eficientismo, por eso animó a "apagar el teléfono móvil para mirar a los ojos de las personas" y aprovechar el tiempo de vacaciones para volver a poner el corazón en el Señor.
En el comentario del Evangelio de este domingo, el Papa destacó que el activismo es "un peligro que está siempre al acecho, también para nosotros: dejarse llevar por el frenesí del hacer", "en el que lo más importante son los resultados que obtenemos y el sentirnos protagonistas absolutos".
Algo que, según aseguró, "también sucede en la Iglesia", "vamos deprisa, pensamos que todo depende de nosotros y al final corremos el riesgo de descuidar a Jesús".