Papa Francisco a obispos: Inviten a los tibios a volver a la fe

El Papa Francisco recibió esta mañana en audiencia a los obispos de la Conferencia Episcopal de Zambia, quienes se encuentran en Roma en visita ad limina –visita que los obispos de las diferentes Conferencias Episcopales del mundo realizan cada cinco años- y les instó a "evangelizar las culturas" y a estar al lado de los más necesitados.

En su discurso a los prelados, el Santo Padre los alentó a invitar "a aquellos cuya fe se ha vuelto tibia y se sienten perdidos, a regresar a la práctica completa de la fe".

"Como pastores del rebaño, no se olviden de buscar a los miembros más débiles de la sociedad de Zambia, entre los cuales se encuentran los materialmente pobres y los afectados por el SIDA" dado que  "la inmensa mayoría de los pobres tiene una especial apertura a la fe; necesitan a Dios y no podemos dejar de ofrecerles su amistad, su bendición, su Palabra, la celebración de los Sacramentos y la propuesta de un camino de crecimiento y de maduración en la fe".

El Papa recordó luego a los misioneros que llevaron al país "el rico depósito de la fe" que finalmente se ha traducido en una "abundante cosecha espiritual, visible también en las numerosas clínicas, hospitales, escuelas y parroquias católicas de Zambia, y en la amplia diversidad de ministerios laicales, y de vocaciones al sacerdocio en una sociedad que se ha visto transformada por los valores cristianos".

Para el Pontífice uno de los grandes desafíos a los que los pastores se enfrentan en este momento es la familia, y pidió a los obispos formar familias cristianas sólidas que conozcan, comprendan y amen las verdades de la fe con más profundidad" y que  sean "firmes en la fidelidad", además de invitar a estar cerca de los jóvenes "que quieren definir y articular su identidad en una época de desorientación".

"Ayúdenlos a encontrar su objetivo en el desafío y la alegría de la co-creación con Dios que es la vocación a la vida matrimonial... o en la vocación al sacerdocio y la vida religiosa que fue dada a la Iglesia para la salvación de las almas", dijo el Papa.

El Pontífice aconsejó también a los obispos para que sean "padres amables y firmes con vuestros sacerdotes ayudándolos a resistir al materialismo y a las reglas del mundo, reconociendo al mismo tiempo sus justas necesidades y promoved el tesoro de la vida religiosa en vuestras diócesis".

A continuación, mostró su comprensión de la situación que se vive en el país tras la muerte del presidente Sata, que murió el pasado 10 de octubre en Londres mientras recibía tratamiento médico. "Los invito a seguir trabajando con los líderes políticos por el bien común, profundizando en vuestro testimonio profético en defensa de los pobres con el fin de elevar la vida de los débiles".

''La misión evangelizadora de la Iglesia nunca termina: 'es imperiosa la necesidad de evangelizar las culturas para inculturar el Evangelio. Toda cultura y todo grupo social necesitan purificación y maduración'".