El Papa Francisco celebró una Misa en el estadio de béisbol de Nagasaki este domingo 24 de noviembre, Solemnidad de Cristo Rey, durante su viaje apóstolico en Japón.
En su homilía, el Santo Padre reflexionó sobre el Evangelio dominical de San Lucas y afirmó que "las burlas y gritos de sálvate a ti mismo frente al inocente sufriente no serán la última palabra; es más, despertarán la voz de aquellos que se dejen tocar el corazón y se decidan por la compasión como auténtica forma para construir la historia".
"Hoy aquí queremos renovar nuestra fe y nuestro compromiso; conocemos bien la historia de nuestras fallas, pecados y limitaciones, al igual que el buen ladrón, pero no queremos que eso sea lo que determine o defina nuestro presente y futuro", dijo el Papa.