El diputado autonómico de la Izquierda Unida (IU) de Aragón, Adolfo Barrena, exigió a los médicos que trabajan en servicios sanitarios públicos, renunciar a la objeción de conciencia por motivos morales o religiosos y acatar todas las medidas dispuestas por los centros de salud aunque estén en desacuerdo.

Barrena, que defenderá el jueves en el Pleno de las Cortes la Ley Estatal del Personal de Servicios de Salud, criticó que algunos trabajadores sanitarios antepongan sus derechos personales como profesionales a los derechos del ciudadano y no acepten “recibir toda la cartera de servicios”.