Los obispos de España siguen manifestándose contra la Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo (la nueva ley del aborto) después de su entrada en vigor hace tres semanas y recuerdan que se trata de una norma que no puede ser moralmente vinculante y de cuya aplicación se acabará arrepintiendo la Humanidad, como se avergüenza de la esclavitud.
Así lo han expresado en distintos actos públicos desde la entrada en vigor de la ley, el pasado 5 de julio, cuando la Conferencia Episcopal Española (CEE) dio a conocer un documento en el que aseguraba que la norma es "objetivamente incompatible con la recta conciencia moral" que además, lleva al sistema educativo español "la ideología abortista y de género".
Las últimas declaraciones en este sentido las ha protagonizado este viernes el Presidente del Episcopado y Arzobispo de Madrid, Cardenal Antonio María Rouco Varela, en los cursos de verano de la Fundación Universidad Rey Juan Carlos en Aranjuez (Madrid), donde ha asegurado que "las sociedades europeas han entrado en un sendero fatal de un radical no a la vida".