La Iglesia Católica de Paraguay pidió a las autoridades nacionales, y en particular a las fuerzas públicas, "evitar amedrentamientos" en las manifestaciones que miles de campesinos han iniciado para exigir una solución a la crisis financiera que los aqueja.
"Al contrario, los debemos tratar como hermanos que buscan una vida mejor", afirmaron los Obispos en un mensaje titulado "Tierra, trabajo y condiciones para una vida plena", con fecha 11 de agosto.
Desde el 10 de julio grupos de campesinos se han movilizado en la capital de Paraguay, Asunción, frente a la sede del Congreso Nacional para exigir que se apruebe una ley de emergencia nacional y condonación de las deudas.