La Conferencia Episcopal de Nigeria (CEN), pidió a las autoridades civiles y militares del país detener los atentados de extremistas musulmanes de la secta Boko Haram y garantizar la seguridad y propiedad de los nigerianos.
"Se trata de una tarea primordial del gobierno garantizar la seguridad de la vida y de la propiedad de los ciudadanos en todo el país. No hay excusas para no cumplir con este deber primario", exhortaron los obispos a las autoridades nigerianas.
Una declaración de la CEN enviada a la agencia vaticana Fides el 26 de junio señaló que "las personas que han muerto en explosiones de bombas y atentados de represalia (de la secta Boko Haram) son todos hijos inocentes de Dios, hombres, mujeres y niños, cristianos y musulmanes de diferentes tribus, todos nigerianos, creados y amados por Dios".