Obispo rechaza discriminación contra jóvenes por miedo al coronavirus

El Arzobispo Metropolitano de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa Mendieta, reprobó el rechazo de algunas personas de acoger a un grupo de jóvenes becados que regresaron de China por temor al coronavirus, y pidió vivir en solidaridad frente a la amenaza de esta enfermedad.

Este domingo 2 de febrero un grupo de 26 jóvenes regresaron a Panamá luego de terminar sus estudios en China, detalla CNN.

El grupo llegó al aeropuerto internacional de Tocumen, donde fueron llevados a una escuela bajo fuertes medidas de seguridad. Las autoridades de salud señalaron que los jóvenes permanecerán por dos semanas bajo observación y constante monitoreo.

Los residentes de Pacora, lugar donde se encuentran en cuarentena los 26 jóvenes, realizaron protestas para reclamar que los desalojen del colegio y los muevan a otro lugar de la ciudad, por temor a un posible contagio de coronavirus.

La acción de los vecinos incluyó bloqueo de calles y enfrentamientos con la policía, a pesar de que el Ministerio de Salud (Minsa) aseguró en una conferencia de prensa que los jóvenes están sanos.

Por medio de una carta, Mons. Ulloa señaló su preocupación sobre la reacción de los pobladores, quienes han manifestado "públicamente el rechazo de acoger a los jóvenes estudiantes becados de China".

"Podemos entender la preocupación más no la forma en que han protestado. Es importante recordar a los fieles cómo vivir la solidaridad", comentó el Prelado.

Recordando las palabras del Papa Francisco, Mons. Ulloa llamó a hacer propia la necesidad de los demás y vivir la solidaridad al poner a "disposición de Dios lo que tenemos, nuestras humildes capacidades, porque sólo compartiendo, sólo en el don, nuestra vida será fecunda, dará fruto"

"Les agradecemos todo el apoyo para que ante esta amenaza del coronavirus, nos mantengamos firmes en la fe, solidarios y responsables", concluyó.

Además, el Prelado pidió a los fieles evitar estrecharse las manos o dar abrazos en el saludo de la paz, y recibir la comunión en la mano, como medida de prevención frente a la propagación del virus nacido en Wuhan.

Finalmente, llamó a los fieles a no compartir información no oficial, que pueda provocar alarma entre la población.