27 de julio de 2005 / 1:35 a. m.
El Obispo de Niamey (Níger), Mons. Michel Christian Cartatéguy, agradeció al Papa Benedicto XVI la donación enviada a través del Pontificio Consejo “Cor Unum”, a las poblaciones afectadas por la gran sequía y hambruna que afectan a ese país africano.
“Quiero agradecer al Santo Padre que nos ha enviado por medio del Cor Unum una suma tan importante”, indicó el Prelado a la agencia vaticana Fides.
Mons. Cartatéguy destacó la labor y ayuda que otras organizaciones católicas y muchos países realizan en la zona ante el problema de la sequía. Agregó que ha vuelto “una tenue esperanza a los corazones de las personas porque ha llovido en abundancia en los últimos días”.
“Con el retorno de las lluvias, la cosecha está prevista para octubre o noviembre, por lo que es vital la ayuda que llegue en estos meses a Níger para abastecer a la población”, indicó.
Recientemente, un informe de la Organización de Naciones Unidas advirtió que en Níger, 800 mil niños son afectados por la carestía y más de 150 mil padecen grave malnutrición y están en peligro de muerte. Asimismo, estimó que 4 millones de personas sobre 12 millones de habitantes de Níger están en peligro por hambre.