22 de julio de 2013 / 05:15 PM
Gustavo Silva Clemente hoy vivió una de las experiencias más memorables en sus cortos 9 años. Lo eligieron para obsequiar unas flores al Papa Francisco a su arribo a Rio para asistir a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) y asombró a los periodistas por la gran emoción que lo embargó.
En declaraciones a ACI Prensa al final de la breve ceremonia de bienvenida en el aeropuerto,Gustavo dijo que poder haber estado cerca del Papa fue una emoción muy grande.
Vestido con una camiseta verde sobre la que tenía un rosario, afirmó: "es una gran emoción... y no tengo palabras".