Al visitar esta mañana el Pontificio Instituto de Música Sacra, con ocasión de su reciente renovación, el Papa Benedicto XVI pidió a las autoridades eclesiásticas velar para que el ‘aggiornamiento’ de la música religiosa se haga en continuidad con la tradición viva de la Iglesia.
Luego de saludar y agradecer a los benefactores del Instituto, así como a su Gran Canciller, el Cardenal Zenon Grocholewski, el Santo Padre elogió este centro de música litúrgica, donde “numerosos estudiantes, que vienen acá de todas partes del mundo para formarse en las disciplinas de la música sacra, se convierten a su vez en formadores en sus respectivas iglesias locales”.
El Pontífice destacó la importancia que el Concilio Vaticano le concede a la música sacra y señaló “cuán rica es la tradición bíblica y patrística en subrayar la eficacia del canto y de la música sacra para mover los corazones y elevarlos a penetrar, por así decirlo, en la misma intimidad de la vida de Dios”.