Unos siete mil ciudadanos en Argentina piden al Senado de la Nación que rechace el proyecto que busca darle rango constitucional a la "Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer", conocida como Convención de Belem do Pará, y que es usada como un instrumento del feminismo radical para promover el aborto en la región.
La Convención fue firmada el 9 de junio de 1994 en la ciudad brasileña de Belem do Pará y en Argentina fue reconocida con la ley 24632 en 1996. Desde entonces ha habido varios intentos para darle rango constitucional.
El pasado 5 de mayo se aprobó el dictamen en la Comisión de Banca de la Mujer en el Senado, en un debate en el que participaron diversas representantes como Norma Durango y Gladys González, senadoras que promueven la iniciativa.