Durante el reciente coloquio "Sobre las Culturas Religiosas en la Ciudad de México", promovido por la Vicaría de Pastoral de la Arquidiócesis de México, a cargo de Mons. Alberto Márquez Aquino, se obtuvieron datos fundamentales para el diseño de una nueva estrategia de evangelización en la capital del país.

El coloquio giró en torno a una encuesta realizada a 20 años del II Sínodo Diocesano, con la finalidad de determinar algunas áreas de oportunidad en la evangelización, y establecer, a través de un análisis, hacia dónde podrían dirigirse los esfuerzos para erradicar o reducir a su mínima expresión las creencias mágicas.

Parte de ese análisis fue presentado en el coloquio por el aspirante al diaconado permanente, el Sr. José de Jesús Múgica Hernández, quien refirió los alcances de este estudio. El expositor destacó que hay tres sectores capitalinos más inclinados a las creencias mágicas: los varones, la juventud y quienes no tienen ningún compromiso eclesial.

Según señala el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (SIAME) esto constituye "un área de oportunidad para la evangelización que impulsa esta Arquidiócesis", mientras que los resultados cualitativos y cuantitativos de esta encuesta "tienen que mirarse con espíritu de caridad comprensión", para valorar las ideas resultantes en su justa dimensión, y "así poder configurar estrategias para eliminar estos problemas".

El análisis citado por el Sr. Múgica Hernández, indica que es notable la frecuencia con que se repite el fenómeno de las creencias mágicas entre los católicos de la Arquidiócesis de México, además de que se diagnosticó que entre las prácticas más frecuentes de los encuestados están "las limpias, la astrología y la recarga de energía cósmica, siendo esta última una de las nuevas modalidades que supuestamente tienen sus orígenes en las antiguas culturas mesoamericanas y africanas".

El estudio también refleja que los sectores menos afectados por las prácticas de idolatría son las mujeres, la población mayor de 30 años y aquellos que tienen vida eclesial. Esto sucede porque suelen tener "una mayor cercanía con la Iglesia", expresó el presentador.

Hubo encuestados que reconocieron que van con más frecuencia a la Iglesia como una manera de alejarse de otras tantas prácticas idólatras, como: invocación de espíritus, tarot y lectura de cartas, santería, culto a la santa muerte, y la brujería, que también se practican en la capital del país.

De esta manera, el Sr. Múgica expresó que "(estas personas) se acercan a la conversión a través del compromiso eclesial, y poco a poco asumen algunas funciones dentro de las parroquias".

Por esa preocupación de que el sector juvenil sea de los más afectados por las creencias mágicas, Múgica expresó que "es una oportunidad para dar continuidad a la catequesis y reforzarla durante la etapa juvenil y adulta".

Pero advirtió que "los padres y tutores tendrán que fortalecer su testimonio y poner mayor énfasis al acompañamiento que le brinden a los niños, adolescentes y jóvenes, para vivir el Evangelio todos unidos".