Mel Gibson, director del film La Pasión, confesó que espera tiempos aún más difíciles para él y su equipo de producción.
A pocas semanas del estreno en Estados Unidos –previsto para el 25 de febrero-, los ataques contra el film persisten y quienes han visto la película, incluyendo a varias autoridades vaticanas, no dudan en promoverla.
“Anticipo que lo peor está por venir. Espero estar equivocado. Espero estar equivocado”, reiteró Gibson ante unos cuatro mil quinientos líderes evangélicos reunidos en Orlando para ver la película en una función previa.