A su turno, la Academia Nacional de Medicina ve con "honda preocupación la legalización de un protocolo que atenta contra los principios consagrados por la Constitución Nacional, los tratados internacionales con los que el país está comprometido y las leyes nacionales".
"Las causales de aborto según el protocolo aprobado son interpretadas de manera arbitraria y los médicos están obligados a realizar un aborto sin una clara definición de objeción de conciencia", describió la Academia.
Además, denunció, "las instituciones no pueden argumentar objeción de conciencia, es decir que tienen la obligación de realizar abortos, aunque sus estatutos lo prohíban". "El documento desconoce en forma manifiesta la ética, las leyes, la religión, la patria potestad, los derechos humanos y el valor de la vida", señaló.
La Academia Nacional de Medicina recordó que"Hipócrates, hace 25 siglos prohibió a los médicos realizar abortos; esta norma se encuentra en el juramento hipocrático que los médicos de nuestros días prometen respetar al ingresar a la profesión".