El Observador Permanente de la Santa Sede ante la ONU, Mons. Gabriele Caccia, afirmó que los católicos y sus organizaciones pueden ayudar a la comunidad internacional a ver su "falta de consistencia" para implementar sus principios más básicos como el respeto de la dignidad de todo ser humano.
"¿Cómo podemos proclamar los derechos de las personas con discapacidad si al mismo tiempo permitimos que los niños diagnosticados con síndrome de Down en el vientre materno sean eliminados antes de nacer?", cuestionó el Prelado en el evento titulado "Una visión de fe para la ONU en los 75 años y más allá", realizado en Nueva York el 21 de octubre en ocasión del 75 aniversario de la institución.
"¿Cómo podemos tener hermosos foros sobre la cultura de la paz y permitir también que varios países construyan políticas extranjeras sobre la base de la amenaza de destrucción mutua?", preguntó.