Uno de los dos pastores cristianos encarcelados por la persecución religiosa en Irán fue liberado tras haber sido arrestado por segunda vez por las autoridades locales en los días de Navidad.

El Director Ejecutivo en Washington D.C. del Centro Americano de Ley y Justicia (CALJ), Jordan Sekulow, anunció en su blog el 7 de enero que el pastor iraní, Yousef Nadarkhani de 35 años de edad había sido liberado.

En su blog, Sekulow dice que la liberación del pastor fue “directamente el resultado de personas alrededor del mundo que se han parado y han demandado su libertad” y señaló que Nadarkhani “se ha convertido en el rostro de la persecución alrededor del mundo”.

El director ejecutivo de CALJ, explicó además que el arresto del pastor en Navidad demuestra claramente las intenciones del gobierno Iraní que busca “intimidar a las personas de creencias minoritarias”.

Nadarkhani fue encarcelado por primera vez en el año 2009 luego de quejarse con las autoridades locales que a su hijo lo habían obligado a leer el Corán en el colegio. El pastor fue acusado de haber abandonado el Islam y en febrero 2012 se emitió una orden de ejecución para el pastor que no se llevó a cabo por la presión que ejerció el CALJ.

Gracias a la presión internacional, Yousef fue absuelto en septiembre, tras ser acusado de apostasía y se le permitió regresar con su familia. Sin embargo fue arrestado nuevamente en Navidad.

Sekulow informó que hay otro pastor cristiano, Saeed Abedini, ciudadano estadounidense de 32 años de edad, converso del Islam al cristianismo, que sigue encarcelado en Irán y está en una de las “más notorias y brutales prisiones” del país.

La familia de Abedini en Irán está bajo arresto domiciliario mientras que su esposa y sus hijos están en Estados Unidos luchan para lograr su liberación y denuncian las consecuencias del encarcelamiento para sus seres queridos.

“Irán está mirando y responde a la presión internacional” dice Sekulow mientras llama a reanudar esfuerzos y elevar oraciones por el pastor. El CALJ ha presentado al gobierno estadounidense una petición que hasta el momento tiene 64 mil firmas que exigen la liberación de Abedini.

Sekulow señala que “nosotros debemos continuar exigiendo que Irán detenga sus abusos y la persecución a los cristianos y a ellos que desean defender los derechos humanos”.

El pastor Abedini se dedicaba a comenzar lugares de culto clandestinos en algunas casas, que sumó a las razones esgrimidas por las autoridades para su arresto. En 2009 llegó a un acuerdo con el gobierno iraní que le permitió viajar libremente dentro y fuera del país, siempre y cuando dejase su labor en esos lugares.

De conformidad con este acuerdo, el pastor volcó su atención hacia los esfuerzos humanitarios con los orfanatos no religiosos en el país. Sin embargo, durante uno de sus viajes visitando a sus padres, fue detenido de manera ilegal en septiembre del 2012.