El 14 de septiembre el Vaticano dio a conocer un comunicado en el que explicó que el Preámbulo entregado a los lefebvristas ese día "establece algunos principios doctrinales y criterios de interpretación de la doctrina católica, necesarios para garantizar la fidelidad al Magisterio de la Iglesia y el ‘sentire cum Ecclesia’ (sentir con la Iglesia)".
Al mismo tiempo, deja abierta "a una discusión legítima, el estudio y la explicación teológica de expresiones o formulaciones particulares presentes en los documentos del Concilio Vaticano II y del Magisterio sucesivo".
El texto de la Oficina de Prensa también recuerda que el Santo Padre decidió en 2009 levantar la excomunión que pesaba sobre los cuatro obispos ordenados por Lefebvre "a raíz de la súplica dirigida por el Superior General de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X a Su Santidad Benedicto XVI el 15 de diciembre de 2008".
El 4 de febrero de 2009 la Secretaría de Estado del Vaticano dio a conocer un comunicado en el que se precisa que "el levantamiento de la excomunión ha liberado a los cuatro obispos de una pena canónica gravísima, pero no ha cambiado la situación jurídica de la Fraternidad San Pío X, que en el momento actual, no goza de ningún reconocimiento canónico en la Iglesia Católica".