Al presidir el rezo del Regina Caeli frente a la multitud congregada en la Plaza de San Pedro, en el Domingo de la Ascención, el Papa Francisco señaló que Jesús, al ascender a los cielos, llevó al Padre el regalo de sus llagas, "y cuando el Padre mira las llagas de Jesús, nos perdona siempre".
El Santo Padre dijo que "Jesús, cuando va al Cielo, le lleva al Padre un regalo. ¿Pensaron en esto? ¿Cuál es el regalo que Jesús lleva al Padre? Sus llagas. Este es el regalo que Jesús lleva al Padre. Su cuerpo es bellísimo, sin las heridas de la flagelación, no, todo hermoso, pero, ha conservado las llagas".
"Y cuando va al Padre, le dice al Padre: Mira Padre, éste es el precio del perdón que tú das. Y cuando el Padre mira las llagas de Jesús, nos perdona siempre. No porque nosotros somos buenos, no. Porque Él ha pagado por nosotros. Mirando las llagas de Jesús el Padre se vuelve más misericordioso, más grande, ¡eh!".