El 50 por ciento de los incendios registrados en lugares de culto en Estados Unidos entre 1996 y 2015 fueron provocados según ha revelado un análisis de Pew Research Center.
Los incendios en lugares de culto son investigados en Estados Unidos por el Departamento de Alcohol, Tabaco, Armas y Explosivos y clasificados en las categorías de bombas, provocados, amenazas o indeterminados.