Recientemente, el Tribunal de Justicia de Sao Paulo revocó la decisión de retirar una serie de históricas imágenes de Nuestra Señora Aparecida, declarada Patrona de Brasil en 1929, de una ciudad de importancia para los católicos en el mundo.
Las estatuas e imágenes marianas que iban a ser retiradas se ubican en las rotondas de Aparecida del Norte (Sao Paulo), ciudad de gran importancia para los católicos, pues allí se encuentra la Basílica de Nuestra Señora Aparecida, la segunda más grande del mundo después de la Basílica de San Pedro del Vaticano.
Las imágenes también tienen un gran valor histórico, religioso y cultural, pues representan el hallazgo de la estatua original de Nuestra Señora Aparecida en el lecho del río Paraíba do Sul en 1717. La reliquia original está custodiada en la Basílica que lleva su nombre.