La Iglesia en España respondió dura y rápidamente a los insultos del Ministerio de Salud socialista, que en días pasados había acusado de “fundamentalista” a la Iglesia Católica por oponerse a una estrategia de lucha contra el SIDA basada en el preservativo.
“Los fundamentalistas son ellos, que dicen que el preservativo elimina al cien por cien el riesgo de transmisión del SIDA, cuando no es así”, replicó el Delegado de Pastoral Sanitaria, Arturo García Rodríguez.
“Nosotros pensamos que sí existe un riesgo y que la seguridad no es del cien por cien”, explicó además García Rodríguez, al señalar que la apuesta de la Iglesia para prevenir y combatir tan dramática enfermedad pasa por otras vías, muy alejadas del remedio del preservativo. Se trata de dos principios: “Formación y educación”.