El ecónomo del Arzobispado de Tarragona en España, Daniel Sobradillo, aseguró que la ayuda de los ciudadanos a través de la declaración de la renta es imprescindible para que la Iglesia Católica pueda cumplir con su misión de solidaridad por el bien común.
En entrevista con un medio local el 10 de junio, Sobradillo explicó que la Iglesia se financia con los aportes de la declaración de la renta, con lo que se llega a un 25% de los aportes que se reciben.
La otra vía, dijo, "es la que proviene de las colectas, donaciones, legados y las suscripciones periódicas que los fieles realizan voluntariamente, que son alrededor de un 55%. El resto de entradas provienen de los ingresos por servicios y de patrimonio y que representan alrededor de un 20% del presupuesto".