A su turno, la Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile (Conferre) dijo que la crisis humanitaria debido a la migración forzada se agrava por la pandemia de COVID-19 y piden a las autoridades "buscar una solución integral, respetando de manera irrestricta los derechos humanos de estos hermanos y hermanas migrantes".
"Nos duele contemplar la violencia de estos hechos. Queremos pedir perdón por este trato inhumano e indigno que han recibido por parte de algunos compatriotas".
"Como Vida Religiosa Chilena, en primer lugar, los ponemos en el centro de nuestra oración personal y comunitaria. En segundo lugar, nos ponemos a disposición de lo que sea necesario para buscar una solución ante estos hechos", expresó Conferre.
A su turno, la Red Clamor compuesta por instituciones y fundaciones dedicadas a la acogida e integración de personas migrantes en Chile, expresaron su rechazo a las expulsiones de migrantes ya "que han contribuido a generar un clima de odio, de criminalización y estigmatización que exacerba la crisis de gobernabilidad migratoria que hoy enfrentamos".