29 de junio de 2020 / 03:37 AM
El Papa Francisco presidió este 29 de junio la Misa en la Solemnidad de San Pedro y San Pablo en la Basílica Vaticana y bendijo los palios de los 54 arzobispos metropolitanos nombrados durante el año pasado.
En su homilía, el Santo Padre destacó la importancia de la unidad y la profecía y advirtió que en la primera comunidad cristiana "nadie decía: 'Si Pedro hubiera sido más prudente, no estaríamos en esta situación'. No, no hablaban mal de él, sino que rezaban por él. No hablaban a sus espaldas, sino a Dios. Hoy podemos preguntarnos: '¿Cuidamos nuestra unidad con la oración? ¿Rezamos unos por otros?'. ¿Qué pasaría si rezáramos más y murmuráramos menos?".
"No neceistamos ser ricos, sino amar a los pobres; no ganar para nuestro beneficio, sino gastarnos por los demás; no necesitamos la aprobación del mundo, sino la alegría del mundo venidero; ni proyectos pastorales eficientes, sino pastores que entregan su vida como enamorados de Dios. Pedro y Pablo así anunciaron a Jesús, como enamorados", exhortó el Santo Padre.