La idea de que los hombres y las mujeres son diferentes y complementarios ha estado en la Iglesia Católica desde el comienzo. Pero, ¿qué significa exactamente esto para la Iglesia hoy en día? ¿Qué implica para las mujeres que están en la Iglesia? ¿Deberían tener las mismas funciones que los hombres? ¿Tendría que haber una cuota de igualdad entre las personas que sirven en la Iglesia?
Para nada, afirma Mary Hasson, editora del libro "Promesa y cambio: Mujeres católicas reflexionan sobre feminismo, complementariedad y la Iglesia".
"El punto no está en contar cuántas mujeres hay, para compararlo con el de los hombres. La pregunta es ¿hemos integrado suficientemente a la mujer, de manera complementaria, como Dios quiere?