20 de diciembre de 2010 / 03:15 AM
La Conferencia Episcopal de la India señaló que a pesar de la violencia y el sufrimiento causados por los recientes ataques al Santuario Mariano de Nuestra Señora de la Salud, en el que extremistas hindúes destruyeron imágenes sagradas, "los cristianos continuarán rezando y trabajando por la paz y la armonía en el país".
En declaraciones recogidas por la agencia vaticana Fides, la Conferencia Episcopal dio a conocer que fueron los fieles que asistieron a la Misa el 12 de diciembre quienes se encontraron con que vándalos habían desfigurado y decapitado, entre otras, las imágenes de la Madre de Dios, de San Juan y de María Magdalena.
Los daños habrían sido ocasionados por miembros de grupos extremistas hindúes que no ven con buenos ojos la labor de los cristianos en la zona, según cristianos locales.