“Educar el deseo” o examinar lo que el corazón humano realmente quiere es el enfoque que presenta el nuevo columnista de Catholic News Agency (CNA), Matt McGuiness en un artículo sobre la mejor manera para combatir la pornografía.

En un entrevista concedida a CNA, agencia que hace parte del grupo ACI, el 9 de enero, McGuiness señaló que “realmente debemos mirar hacia el interior de nosotros mismos y ver ¿Qué es lo que queremos?... Cristo quiere nuestro corazón, y quiere que vayamos hasta lo profundo de nuestras interrogantes que se encuentran en lo más íntimo”.

El escritor critica los intentos populares para combatir el uso de la pornografía, que buscan centrar el problema “en la cuestión moral de manera aislada” y señala que existen métodos que tienen doce etapas, la fuerza de voluntad o la confesión frecuente pero estas no enfrentan la raíz del problema.

Afirma que ante la pornografía se debe tomar en serio la condición humana de la persona “la pregunta de fondo es ¿Qué es lo que busca el hombre? Existe una carencia… y la pornografía es una señal de eso, es la señal de nuestro deseo de felicidad”.

McGuiness dijo que escribió su nueva columna con la esperanza que “las personas sean más honestas” con sus propias luchas contra la pornografía, una industria de miles de millones de dólares que crece cada día más.

“Espero que las personas estén abiertas a percibir que la pornografía es un síntoma de una profunda necesidad que está en corazón de cada uno.  Y esa necesidad es la felicidad.  Si tomamos ese deseo de felicidad en serio, creo que la pornografía perdería su encanto”, precisó.

El columnista dijo que “si comparamos lo que quiero con lo que ofrece la pornografía, tenemos una simple pregunta: ¿Deseo mi felicidad o no?, y si la deseo, la pornografía podría ayudarme sólo si es una distracción de la misma (felicidad) pero luego pierde su atractivo”.

McGuiness sostiene que “educar el deseo” implica un riesgo pero el riesgo es menor que el peligro si no se toma en serio el deseo. “El deseo es curioso. Si lo sigues quieras o no, te lleva a todo tipo de lugares oscuros. Si tratas de suprimirlo o negarlo, te muerde y arranca algo de ti, por tanto creo que la única manera es tratarlo de frente”.

El enfoque de “educar el deseo”, afirma, es inspirado en los Evangelios e “involucra continuar con la pregunta ¿Qué es lo que quiero”.

McGuiness en definitiva cree que un encuentro con la belleza de Cristo permite al hombre dejar la pornografía: “encontrarse con la mirada de Cristo, ya sea a través de la adoración o la conversación con un amigo, y hago la comparación, ¿Qué me ofrece Cristo y qué me ofrece la pornografía?, es obvio que Cristo es la respuesta”.

La primera columna de una serie de tres la puede leer (en inglés) aquí. http://www.catholicnewsagency.com/column.php?n=2425