El Vaticano estudia un posible milagro que permitiría la beatificación del Cardenal argentino Eduardo Pironio, que falleció en 1998. Se trata de la curación de un niño de año y medio que se recuperó de una grave dolencia en el año 2008.
La Santa Sede estudia el caso de un niño que en dicho año se recuperó inexplicablemente tras intoxicarse con purpurina en la localidad de Santiago del Estero en Argentina. El pequeño ha seguido su vida con normalidad y sin las graves secuelas que los médicos habían pronosticado.
La familia del menor intoxicado tenía una estampita con su nombre. Luego recurrir a su oración, el niño mejoró y fue dado de alta sin ninguna secuela a pesar de que los médicos le habían dicho que si sobrevivía, iba a tener graves secuelas.