16 de diciembre de 2014 / 08:32 PM
Los cristianos que huyeron de Mosul y de la Llanura de Nínive que encontraron refugio en Jordania son ahora más de 7.000, y los recursos disponibles para su asistencia se terminarán en dos meses.
Es la alarma que ha comunicado Wael Suleiman, director de Cáritas Jordania, a la agencia vaticana Fides: "el 70 por ciento de los refugiados cristianos se concentra en el área de Ammán. Un millar de ellos están alojados en 18 parroquias, otros encontraron alojamiento en casas", señala.
"Viven soñando con escapar a los Estados Unidos, Australia y Europa, en un terrible estado de espera que afecta principalmente a los chicos y chicas en edad escolar: pasan días enteros sin hacer nada, porque, por razones burocráticas, no tienen acceso a las escuelas jordanas".