Un sacerdote católico que trabaja en Irak explicó que el número de personas necesitadas que no llega a cubrir sus necesidades básicas en el país, que ya son millones, crecerá a causa de la pandemia del coronavirus.
"El brote de COVID-19 en Irak y las medidas de mitigación impuestas por las autoridades de salud y de seguridad tienen ramificaciones en casi todos los aspectos de la vida pública y familiar, y han sacudido la economía", explicó el P. Joseph Cassar.
El P. Cassar, que trabaja en el Servicio Jesuita para Refugiados, habló por video desde Erbil (Irak), durante la conferencia de prensa en la que se presentó, este viernes en el Vaticano, el mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado que este año se celebrará el 27 de septiembre.