25 de marzo de 2005 / 10:55 a. m.
Miles de fieles en El Salvador recordaron ayer, coincidiendo con las celebraciones de Jueves Santo, los 25 años del asesinato del Arzobispo de San Salvador, Mons. Oscar Arnulfo Romero, cuyo proceso de beatificación ha sido presentado al Vaticano.
El Arzobispo fue asesinado de un disparo al corazón cuando oficiaba una Misa la noche del 24 de marzo de 1980 en la capilla de un hospital.
Miles de fieles en El Salvador participaron ayer en Misas, peregrinaciones y procesiones para recordar su memoria.
El 24 de marzo de 1994, la Iglesia en El Salvador puso en marcha el proceso de beatificación por martirio, que actualmente se encuentra en la Santa Sede.
El asesino del Arzobispo nunca fue capturado; pero el gobierno de entonces culpó a la guerrilla marxista de su muerte; mientras que un informe de la Comisión de la Verdad de Naciones Unidas determinó que el autor intelectual del crimen fue el hoy fallecido Roberto D'Abuisson, acusado de liderar a los temidos “escuadrones de la muerte” y uno de los fundadores del actual partido en el gobierno, la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
Por su parte, El Obispo de Pensacola (Estados Unidos), Mons. John Ricard, Presidente del Comité de Política Internacional del Episcopado Norteamericano, emitió un comunicado expresando su esperanza de que el testimonio de Mons. Romero “continúe guiando a toda la Iglesia de América, la América que el Santo Padre nos pide que construyamos sobre la base de justicia y solidaridad”.