Al finalizar la Audiencia General, el Papa Francisco recordó que hoy, 24 de agosto, se cumplen 6 meses desde que estalló el conflicto en Ucrania y lamentó las víctimas inocentes de "la locura de la guerra".
El Santo Padre renovó "la invitación a implorar por la paz del Señor para el amado pueblo ucraniano que sufre el horror de la guerra desde hace 6 meses".
Con semblante serio y preocupado, pidió también que se tomen medidas para "evitar el riesgo de una catástrofe nuclear en Zaporizhzhia", la ciudad del sureste de Ucrania donde se encuentra una de las mayores centrales nucleares de Europa y donde cientos de personas llevan meses atrincheradas.